Vendida la consola más cara de la historia, ¿Quiénes la fabricaron?
A mediados de los años noventa, las grandes compañías de videojuegos competían para hacerse con el liderazgo en el mercado de las videoconsolas. La legendaria lucha entre Nintendo y Sega pasó a la historia como una de las rivalidades más apasionantes que jamás ha vivido este sector. En plena época de los 16 bits Nintendo decidió colaborar con otra multinacional para dar un paso más e incorporar el CD como formato. Esa compañía era Sony. Llegó a fabricarse un único prototipo. Ahora ese prototipo se ha subastado convirtiéndose en la consola más cara hasta el momento.
Más de 350.000 dólares. Ese es el precio que se ha pagado por la consola más cara de toda la historia. La Nintendo Playstation (no deja de resultar curioso leer ese nombre con “Nintendo” por delante) iba a suponer la jugada maestra de la firma de Super Mario para establecer su dominio de manera firme. Sin embargo, la colaboración no cuajó. Nintendo no quiso continuar trabajando el formato CD porque, según ellos, el tiempo que tardaban los videojuegos en cargar era demasiado elevado. Sony por su parte decidió sacar su proyecto en solitario y por su cuenta. El resto ya lo saben. Una de las grandes revoluciones de este sector nació de un desentendimiento. Sony Playstation lanzó cuatro consolas (la quinta se lanzará a finales de este año) y vendió 455 millones de unidades.
La consola más cara, pero no tan cara
Pese a haber sido traspasada por una cantidad desorbitada, su anterior propietario no ha sacado de ella el rendimiento económico que esperaba. De hecho, su pronóstico había llegado a superar el millón de dólares en el momento de comenzar la subasta.
Pasará mucho tiempo hasta que este récord pueda batirse. La consola más cara de todos los tiempos es y será durante décadas la única Nintendo Playstation que jamás se fabricó. Una delicia para los amantes de los videojuegos antiguos y los románticos del sector. La única lástima es que no existan juegos propios de este mítico hardware para ponerla en funcionamiento.